Espìritu Santo:
Te consagramos nuestra Patria.
Intercede y vela por quienes vivimos en ella.
No nos dejes perdernos por caminos sin Dios,
reorièntanos al gozo de la fe y la verdad.
Espìritu de paz, perdòn y misericordia
libranos de la violencia y la discordia
y ensèñanos a hablar las lenguas
siempre nuevas de la fraternidad.
Espìritu de alegria, consuelo y fortaleza
sànanos del desànimo, el miedo y la tristeza.
Espìritu de generosidad y de justicia,
apàrtanos del egoìsmo y la avaricia
e inspìranos acciones para crear condiciones
que permitan a todos vivir con dignidad.
Tù que eres la Fuente de la Vida
rescàtanos de la cultura de la muerte,
fecùndanos con Tus dones, Tus frutos y carismas.
Ilumina nuestra tierra, renueva las naciones,
ven como en Pentecostès,
e incendia con Tu fuego de amor los corazones.
Amèn.
No hay comentarios:
Publicar un comentario